Recuerdo perfectamente los domingos de mi infancia. El sonido penetrante y el olor a gasolina del viejo cortacésped de mi padre eran la banda sonora de la mañana. Era una …
Recuerdo vívidamente los fines de semana de mi infancia, marcados por el estruendo ensordecedor del viejo cortacésped de gasolina de mi padre. El olor a combustible, el tirón de la …
Recuerdo vívidamente los domingos por la mañana de mi adolescencia. El ritual era ineludible: mi padre sacaba el viejo cortacésped de gasolina del garaje. Lo que seguía era una sinfonía …
Recuerdo perfectamente la frustración. Un pequeño jardín, apenas 150 metros cuadrados, que se había convertido en mi campo de batalla personal. Cada dos semanas, la hierba crecía con una tenacidad …
Cada fin de semana, la misma historia. El jardín, ese pequeño oasis de paz, nos llama para su mantenimiento, y la pieza central de esa tarea es casi siempre un …
Recuerdo perfectamente la frustración de cada fin de semana. Mi jardín, un modesto oasis de unos 120 metros cuadrados, se convertía en un campo de batalla. La batalla era contra …
Hay una sensación particular que todo propietario de un jardín conoce bien: la ligera congoja al mirar por la ventana después de una semana de lluvia y sol, solo para …
Recuerdo perfectamente los domingos de mi infancia. El ritual era casi sagrado: el rugido del viejo cortacésped de gasolina de mi padre, el olor penetrante a combustible y el tedioso …
Recuerdo perfectamente esos sábados por la mañana que comenzaban con un suspiro. Al mirar por la ventana, el césped no parecía un manto verde y acogedor, sino un campo de …
Durante años, el mantenimiento de un jardín de tamaño considerable ha sido un compromiso. O bien te resignabas al estruendo y los humos de un cortacésped de gasolina, con su …